¿Es el ateísmo de Pedro
Sánchez una experiencia cristiana de Dios.?
El verdadero ateo no es el hombre
que niega a Dios, al sujeto, sino el hombre para el cual los atributos de la
divinidad, tales como el amor, la sabiduría y la justicia, no son nada. Y la
negación del sujeto no implica, ni mucho menos, la negación de los atributos.
El secretario general de la
Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, tuiteó ayer que el permiso dado
por el Gobierno para atracar en Valencia y acoger a los inmigrantes a bordo del
Aquarius «es un buen gesto de solidaridad de España que nos alegra.
“La cruz cristiana no es un
objeto de la casa o un ornamento para llevar, sino que la cruz cristiana es un
recordatorio del amor con el cuál Jesús se ha sacrificado para salvar a la
humanidad del mal y del pecado.”
Dios también protegió a los
extranjeros y a los refugiados, un ejemplo lo podemos encontrar en el libro de
Rut. Incluso el mismísimo Jesús, cuando niño, junto a sus padres llegó a Egipto
como un refugiado más que huía de la persecución, de la intolerancia...
“Id, pues, y aprended lo que significa:
Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos,
sino a pecadores, al arrepentimiento” (Mateo 9:13).
Hoy hay leyes, normas y marcos
injustos para los inmigrantes en España. No hay igualdad de trato, no hay
respeto al diferente... Ser cristiano es vivir en compromiso. Sin hacer
justicia y sin amar al prójimo tendiéndole una mano de ayuda es imposible
cualquier tipo de ritual.
Amaras al señor tu Dios con
todo tu corazón con toda a tu alma , con
todas tus fuerzas y con todo o tu
espíritu, y a tu prójimo coma a ti mismo . Jesús añade “haz esto y vivirás” pero el insiste: ¿quien es mí prójimo? Jesús responde con aquella narración
de aquel samaritano solidario y luego repite haz tú lo mismo.
Quien cree en Jesús, no
puede prescindir de El en su entrega al prójimo. No es que la fe sustituya al
prójimo por Cristo, sino que hace vivir la entrega al prójimo en la profundidad y ultimidad sobrenaturales,
como la vivió Cristo.
“El que ama conoce a Dios
porque Dios es amor. ( 1 Jn 4, 7-8) Creado a imagen y semejanza de Dios el
hombre es también imagen viviente, y en el amor encuentra la plenitud de su
vida.
Cuando el ateo se compromete
seria y profundamente en la vida humana, es inevitable que toda su inquietud
sea una intensa “agonía” religiosa. La afirmación de Unamuno resulta entonces
paradójicamente cierta: Los verdaderos ateos están locamente enamorados de
Dios”
Todo lo que no sea un cambio
interno en el corazón del ser humano como resultado de su fe en Cristo, fe
fundada en la sola palabra de Dios, no se formaran iglesias vivientes en Cristo
por otros medios. Y en eso estamos todos en camino. Debemos evangelizar la
cultura, sus valores y no vivir los valores antibíblicos tan cercanos a los que
no tienen esperanza.
No estamos
acostumbrados a que lo religioso se convierta en político. No estamos
acostumbrados a que el cristianismo moleste a los poderosos de nuestro tiempo,
bien sean políticos empresarios, acumuladores de bienes.
No debemos de olvidar que el proceso contra Jesús se convirtió en un
proceso político.
Por eso entre mofas y escarnios, lo nombraron Rey. Rey falso e inútil. No
hubo ninguna posibilidad de salvación para Él, a pesar de los esfuerzos de
Pilatos: un hombre que quiso salvar a Jesús. Pilatos fue un hombre que se
atormentó ante el proceso y, finalmente, tuvo que ceder ante las presiones de
la turba y de los religiosos.
Me pregunto: ¿Existen hoy Pilatos en relación con el cristianismo? No. No
es necesario. Es una figura obsoleta para el cristianismo de hoy.
Nosotros no molestamos ni a los políticos ni a los poderosos de la tierra.
Se puede acumular sin que el grito de los cristianos por la justicia desgarre la
tierra. Se puede marginar a más de la
mitad de la humanidad, sin que aclamemos por los débiles y quebrantados.
José Carlos Enríquez Díaz